Con casi 30 grados de calor se desarrolló ayer por la tarde, en el Centro Nacional de Alto Rendimiento (Cenard) el selectivo para la Copa del Mundo que tendrá lugar en Rusia el próximo mes de mayo. En una competencia un tanto extraña, las marplatenses Ayelén Tarabini y Florencia Salomón, obtuvieron el pase para el torneo Internacional.
Las gimnastas partirán el 23 de mayo hacia Rusia, sólo algunos días después de que se lleve a cabo el torneo Nacional de Clubes de los niveles más altos en el Cenard. Aunque el cansancio podría jugarles una mala pasada, las chicas prefieren competir para no perder la costumbre de enfrentarse a las juezas, ya que ese será el único torneo que tendrán antes de la Copa del Mundo.
La competencia del sábado fue extraña en varios sentidos. Por un lado, el calor de Buenos Aires, que en abril ya debería haberse ido. Por otro, se presentaron sólo tres gimnastas al torneo: las jóvenes del Club Quilmes de Mar del Plata y Tatiana Potochnik, de Budding Gym.
Por la experiencia y las dificultades de sus series, Tarabini y Salomón lograron el primer y segundo lugar respectivamente. El primer puesto tendrá los gastos pagos, mientras que el segundo deberá juntar el dinero para poder viajar.
Asimismo, como todos los torneos que se desarrollan en el Cenard, y a pesar de la gran cantidad de público que asiste al lugar, los aparatos adquiridos por la Federación, acumulados al costado de la pedana, no permitieron ver bien las series de viga y, menos aún, las pasadas de salto.
Cabe destacar que ninguna de las chicas se presentó en paralelas asimétricas, ya que en este selectivo se computaban las notas de los dos mejores aparatos y las dificultades de ejecución de paralelas hacen que las series no consigan un buen puntaje.
Potochnik compitió en suelo y viga, mientras que Tarabini lo hizo en salto y suelo. Salomón, en cambio, eligió la viga y el salto, aunque las dos caídas que tuvo sobre el primer aparato hicieron que el torneo no fuese uno de los mejores.
Por último, el torneo fue extraño por la brevedad, al ser sólo tres gimnastas que competían en dos aparatos, no duró más de dos horas y algunos aficionados que llegaron al Cenard ni siquiera pudieron ver a las chicas en acción.
Para la Copa del Mundo de Suiza habrá otro selectivo abierto en los próximos meses.
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